El equipo cumple, la afición cumple, la directiva falla.

(Foto de Salamanca 24 Horas)

El partido empezaba con el fondo sur abarrotado, como es habitual, y pancartas de apoyo Coque (por el fallecimiento de su padre), y de ‘lloros’ a Hidalgo, para que regrese a ‘su casa’. Le necesitamos más que nunca.

En los primeros 10 minutos de partido, nadie tomaba el control, y ningún equipo generaba peligro. Estaban bastante dormidos, sin ganas. La UDS tocaba mucho atrás, como es habitual, pero sin acercarse a campo contrario, y los asturianos tampoco presionaban. Fue en dicho minuto, cuando la afición empezó a ser lo de siempre. Tras no haber animado como protesta contra la directiva por varias cosas (la principal, que les han quitado sus vallas de separación de peñas), comenzaron a alentar a los jugadores, para llevarlos a la victoria. Y éstos se contagiaron, claro. Empezaron a entrar por las bandas, en especial por la derecha con la velocidad de ‘Piojo’, y a generar peligro. Pero de nada valía ganar la línea de fondo, si Igor da Souza llegaba 2 horas después al área para rematar. Cuando tiene que presionar o rematar, se queda abajo, y cuando tiene que defender, se queda arriba con las manos en jarra. Tiene que salir del equipo, ya que no se le ve decidido a desgastarse físicamente, cosa indispensable.

Gran victoria de la Unión frente al Marino de Luanco la de esta tarde, que coloca quinto en la tabla al conjunto charro, e ilusiona a una afición triste por los graves problemas económicos y la incompetencia de la directiva.

Sucesivas llegadas charras, pero mucho peligro para los visitantes en las contras, que siempre ganaban en velocidad a los laterales. Un gran José Ángel fue quién logró frenar en todas las jugadas al Marino. Tras un rato de intercambio de golpes, en el minuto 41 la UDS lograba el gol. Una gran pared dentro del área de Borja con de Lucas, éste se la devuelve, y el nuevo fichaje logra definir por debajo del brazo del portero, logrando el tanto. La afición se vino arriba, bufandas al aire, y así hasta el final del partido. Un auténtico espectáculo.

Ya en la segunda mitad, el equipo reculó un poco, y ellos abrieron el campo, pero sin poner en serios apuros a la defensa charra. La verdad es que le ponían ganas, pero técnicamente estaban muy justos, nadie destacaba por encima de otro. Llegaban más arriba con el balón controlado, y trataban de generar peligro, pero estaban muy seguros José Ángel y Bueso, que lograron frenar a los asturianos. En ataque, muy poco de la UDS. Igor desaparecido (como es habitual),  y por bandas los jugadores ya estaban cansados. Nada destacable hasta el final del partido, cuando el colegiado se cebó con el Salamanca, y no paró de pitarnos faltas en contra. A punto estuvieron de empatar en una de ellas, cuando golpearon directamente desde el borde del área, y Mario sacó una mano espectacular, poniendo en pie al estadio entero.

Así terminó el encuentro, bastante igualado. El equipo demostró que tiene calidad, y opciones de ascender, pero falta motivación y ganas. Quizás tenga algo que ver que no estén cobrando. Y la afición demostró, una vez más, que es enorme, y que lucha más que nadie por éste equipo. Orgullo de ser unionista. Volveremos.

Ficha del partido:

Unión Deportiva Salamanca: Mario Villoria; Zubiaurre, José Ángel, Pol Bueso, Coque; Víctor Andrés, Lázaro; Borja, de Lucas, ‘Piojo’; Igor.

Marino de Luanco: Rafa Ponzo, Luis Cuenca, Alex Blanco, Omar, Castaño (Chus Hevia, 69’), Saavedra, Alex Arias, Pablo Hernández, Juanma, Robert (Guaya, 78’) y Adrián.

 Árbitro: Ceballos Silva, extremeño. Sólo amonestó a Pablo de Lucas (87’), de la U. D. Salamanca. Tuvo una actuación muy destacada, ya que influyó mucho en el partido, y se llevó varias broncas por parte de los 3.461 espectadores que se dieron cita en el Helmántico.

 Goles: Borja (41’).