Nadie da la cara por los aficionados.

Como ya sabemos, los clubes de Primera División que se habían “rebelado” contra “los grandes”, se bajaron los pantalones en la reunión de ayer, y aceptaron los horarios y el trato de favor hacia Madrid y Barça, por enésima vez. Cuando parecía que alguien iba a luchar por el bien del fútbol (y de nosotros, los aficionados), volvieron a dejarse ganar, sin dar nadie motivos, y saliendo todos tan contentos.

Según afirmaban varios mandatarios de clubes, “es imposible cambiar ya los horarios” y “los derechos con las televisiones ya están firmados”. En cuanto a lo segundo, estoy un poco de acuerdo, ya que son contratos que no se pueden romper, pero lo en lo primero, sí hay una opción: no te presentes.

Atlético de Madrid y Athletic de Bilbao, estaban de acuerdo en no jugar el lunes de la semana de la Supercopa, como es lógico, pero ese partido se disputará en dicha fecha. Dicen que ya no se puede mover de día, y yo les digo que sí. Ambos desean jugar otro día, pues lo que pueden hacer es no ir ninguno al estadio, y todo está hecho. ¿Qué es de la LFP sin equipos que quieran jugar? Están obligados a adaptarse a los clubes, que son los que le dan de comer.

Cerezo, además, declaraba que “es el comienzo de una buena amistad”. ¿Con los que llevan riéndose de ti? Si lo van a seguir haciendo, si tú no pintas nada en el Atlético de Madrid… La buena amistad a la que se refiere Enrique, debe de ser que Madrid y Barcelona van a seguir teniendo tratos de favor, para jugar partidos “fuertes” de Liga en tiempos de Champions, mientras los demás tienen que rotar a 5 jugadores para no tenerlos cansados en competiciones europeas. ¿Por qué dejan ustedes que les puteen? Tienen el poder, es imposible hacer una Liga de 7 equipos, nadie la vería.

La mayor indignación llega cuando te pones a pensar que no tienes, como aficionado, representación alguna en estas asambleas. Los presidentes, que se supone que deberían de luchar por los derechos de sus aficionados, pasando de todo (la mayoría), y organizaciones como la FASFE, no tiene derecho a hablar en estas reuniones. Por esto, yo me pregunto… ¿Es esta la mejor liga del mundo? Para mí, es de las peores…

El supuesto fichaje de Geromel, desmentido.

Si ayer la noticia del día era que el brasileño Geromel fichaba por el Atleti, hoy es justo lo contrario. La directiva ha declarado que el central no es del Atleti, y que tampoco tienen pensado que venga, si no que lo que ahora preocupa es encontrarle una salida a Godín, con la idea de hacer caja. Y cada vez suena con más fuerza su posible fichaje por el Liverpool, que a la vez está pendiente de vender a Daniel Agger.

Según el diario ‘Express’, Pedro Geromel había fichado por el equipo madrileño en una operación con Jorge Mendes, su representante, a cambio de un pago de 3,5 millones de euros, y había sido cedido a la vez al Betis, club que le pretendía desde hace meses. La operación parecía bastante creíble, ya que el Atleti acostumbra a tratar con dicho agente de futbolistas portugués. En cambio, desde el club aseguran que no es cierto que haya llegado, pero todo se verá. Yo ya no me creo nada de nuestro presidente y su consejero.

El Atleti vuelve a promocionar a Huawei.

Como ya hicieron algunos encuentros del pasado curso, los colchoneros lucirán publicidad de Huawei en las camisetas, aunque tampoco durará toda la temporada la promoción. El Atlético ha llegado a un acuerdo con la empresa de electrónica china, por el cual recibirán 500.000€, y ellos podrán mostrar en el centro de la camiseta publicidad durante los 2 primeros choques ligueros, y la Supercopa de Europa contra el Chelsea.

Por ahora, el club no ha encontrado una publicidad fija para sus camisetas, lo que demuestra su reducida capacidad para dirigir un club. Estamos hablando de que un equipo que ha ganado la Liga Europa en 2 de las 3 últimas temporadas, no encuentra un patrocinador. Bueno, sí lo encuentra, pero ellos no aceptan las condiciones económicas. Mejor poco que nada, señores, y teniendo en cuenta la crisis económica que vivimos, no se puede querer ganar una barbaridad. Pero nada, ahí siguen, 25 años después.