El dominio del balón, la base. La irregularidad sigue presente. Hace falta garra. Muchas cosas han cambiado. Faltan fichajes. La cantera tiene futuro.
La Unión
afrontaba hoy su segundo partido de pretemporada, en casa, contra La Granja segoviana. Empezaron
el partido los llamados a ser titulares por ahora, a la espera de terminar de
confeccionar la plantilla. Con dos medio centros de posesión, y De Lucas
actuando de media punta, el equipo dominó la posesión totalmente. Falta algo de
profundidad, pero la base está clara. Laterales arriba, centrales abiertos, un
medio centro baja a recibir, y a partir de ahí, a jugar. Y sobre todo, contra
un equipo tan inferior.
En portería, Adrián Murcia, el recién llegado. Poco o nada
pudimos ver de él, ya que no llegaban los segovianos. De centrales, José Ángel
y Ladero, que aguantó todo el partido. Bien ambos, correctos. Por el lateral
izquierdo, el canterano Coque, que ha pasado del extremo a la zaga, y que
realizó un gran partido, con constantes subidas peligrosas, y sin descuidar
mucho la defensa. Por el otro lado, el vasco Zubiaurre estuvo muy desacertado.
Perdió muchos balones, no atacaba bien, y defendía muy justito. El centro del
campo, lo mejor. Con Víctor Andrés y Manasé, el control del partido era
nuestro, faltaba el último pase, y De Lucas, que debía de ser el encargado,
bajaba demasiado, a pesar de haber hecho un gran partido. Las bandas, bien. Con
Toral (que se lesionó de gravedad el ligamento y fue sustituido por Pablo
Gómez, haciéndolo muy bien también) y Piojo, el equipo encontró llegada. Pero
buscaban demasiado el interior. Arriba, De La Nava, estuvo bien, sin más.
Del partido, poco que decir. Mucha posesión, aunque en
muchas fases del partido era por detrás del medio del campo, y que los
jugadores siguen teniendo muchos altibajos a lo largo del partido, gran
problema de la temporada pasada. Hay ratos que da la sensación de que juegan
con uno menos, nadie corre lo suficiente. Quizá sea falta de concentración,
fatiga, falta de entendimiento… Pero hay que mejorarlo.
Además, hace falta garra. Esa que tanto veo en mi Atleti
desde la llegada de Simeone. Hace falta meter la pierna si es necesario, pero
que el rival no se marche (sin herirle, evidentemente). No puede ser que dejen
pasar al jugador tranquilamente. Hay que luchas más cada balón, que puede valer
un gol.
Y poco más que destacar. Bueno, eso, que todo ha cambiado.
Nada es como con Zegarra. Aquí hay organización, los jugadores hablan entre sí,
tienen clara su función, y eso que faltan muchísimos detalles por pulir, como
aseguran los jugadores, ya que Etxeberría no ha querido profundizar hasta que
no estén todos los futbolistas con los que él contará.
Estos jugadores, llegarán pronto. El míster ya está trabajando
en ello. Manasé y Víctor Andrés, han dejado muy buenas sensaciones, y
seguramente firmarán definitivamente la cesión, lo demás que se traiga, serán
jugadores de ataque, el gran problema de hoy. De La Nava no ha estado fino, e
Igor está falto de forma física, le sobran unos kilos, y no da el rendimiento
esperado de él.
Así que además de lo que se pueda traer, tocará subir
jugadores de categorías inferiores, que vienen pisando fuerte. Hay calidad, y
lo están demostrando varios de ellos.
Yo confío en hacer algo bueno esta temporada, en los
jugadores, en el entrenador, y en la afición, que como ha dicho el mismo
preparador, es de primera. ¡Vamos Salamanca, vamos campeón!