Manzano necesitó confianza. No todos los jugadores valen
para cualquier tipo de juego. Simeone supo darle a los jugadores lo que les faltaba. La afición
manda en el Calderón.
Gregorio Manzano comenzaba su segunda etapa al frente del
club rojiblanco el pasado verano. Desde el principio, la afición confiaba poco,
y eso en el fútbol es un obstáculo difícil de superar.
En pretemporada el equipo no daba buen nivel, y eso provocó
que la afición no apoyara al técnico. En la previa de Europa League, el equipo
ganaba, pero no convencía, y todo esto unido a que la directiva compraba y vendía a última hora, deshaciendo el equipo,
provocó que ‘Goyo’ no pudiera gozar de la confianza necesaria para afianzar un
proyecto.
Trataba de imponer un estilo en el que el equipo tuviera
mucha posesión, pero creo que con los jugadores de los que disponía era misión
imposible. A mí me gustaba cómo estaban jugando, pero con esos jugadores los
goles no llegaban. Los centrocampistas
no son anotadores, y no llegaban balones al delantero, así que el conjunto
tenía la pelota, pero no materializaba. La propuesta futbolística no surgía
efecto.
Posteriormente, en la antigua UEFA, el equipo se motivaba y
ganaba por paliza, pero en liga las cosas seguían sin salir, sólo consiguieron
ganar siendo superiores a Racing y Sporting.
El equipo estuvo 1 mes sin ganar, 6 encuentros, y la parroquia rojiblanca
empezaba a pedir la destitución del técnico, que no contaba ni siquiera con la
confianza de la directiva.
El equipo continuaba con una brillante trayectoria por
Europa, pero no en los torneos nacionales. En invierno, a tan sólo un partido para
terminar la primera vuelta (más el que estaba aplazado y pendiente de jugar),
el equipo marchaba décimo, y solamente había conseguido un punto fuera de casa, así que el preparador jienense sería
destituido al llegar al parón navideño. Pero era demasiado tarde. El equipo
había perdido en dieciseisavos de final en Albacete 2-1, y la remontada en el
Vicente Calderón no llegó. Perdieron 0-1, y quedaron fuera de la Copa del Rey.
Dos días después de la derrota, retiraron del cargo a
Manzano, y el mismo día llegó el ‘Cholo’ de Argentina para tomar las riendas.
El objetivo seguía siendo la Champions, algo que se antojaba imposible.
Los datos de Manzano en este tiempo en liga eran 5 partidos
ganados, 4 empatados y 7 perdidos. 19 puntos. En ellos 23 goles a favor y 27 en
contra. Ninguna victoria fuera de casa.
Para un aspirante a estar entre los 4 mejores, unos números penosos.
En Copa, ninguna victoria en los dos partidos, 3 goles en
contra y 1 a favor.
En cambio, en Europa League las cosas eran muy positivas. 4
partidos ganados, uno empatado y uno perdido, con 11 tantos marcados y sólo 4
recibidos.
En general, una
trayectoria bastante mala, aunque los datos de la Europa League lo maquillen.
Con Diego Pablo todo
cambia. En el partido de su debut, fuera de casa con el Málaga consigue un
0-0 bastante valioso. Además, el conjunto se mostró muy sólido defensivamente,
aunque con pocas ideas en ataque. No había tenido apenas tiempo de trabajar el
preparador. Lo más destacado era el trabajo que realizaba el equipo entero
defendiendo. Todos ayudaban, quizá demasiado. A mí me convencía poco, pero
había que darle tiempo y confianza, cosa que recibió.
Una semana después, el feudo rojiblanco le recibió de manera
espectacular, como el ídolo que siempre fue. La ovación para él fue brutal.
Gozaba del apoyo de todos al grito de “ole, ole, ole, ‘Cholo’ Simeone”, como en
los viejos tiempos. En los del doblete.
Los rojiblancos ganaron el encuentro 3-0, y el optimismo era
total. El equipo era más generoso, Falcao estaba pletórico, y Simeone tenía a
la grada a favor. La temporada prometía muchas alegrías.
Al equipo le tocaban
dos salidas, y en las dos venció (primeros partidos ganados lejos del Manzanares)
sin recibir gol y marcando 4 y 1 goles en los partidos. Se aseguraba la enorme
mejoría en defensa, y el “efecto Simeone” funcionaba a la perfección. Tras
esto, el equipo empató en 3 ocasiones seguidas, con mucha mala suerte y unas
actuaciones estelares de los guardametas rivales. Parecía imposible haber
perdido esos partidos, pero el equipo se repuso, y en el torneo continental
ganó 1-3, lo cuál dio confianza al grupo de que las cosas se estaban haciendo
bien. Había sido el primer gol recibido del equipo, después de 6 partidos seguidos sin encajar. Gran
logro.
El equipo continuó ganando todo en Europa League, incluso la
final, y logró un record de partidos seguidos ganados en competición europea.
En liga, la trayectoria era buena, y el equipo se quedó a tan sólo 1 punto de
jugar la anteriormente llamada Copa de Europa.
El único fallo, la
manera de cerrar los partidos. En los últimos minutos de los duelos, el equipo
ha recibido muchos goles, porque se encierran atrás, y el equipo no
consigue sacar todos los balones. La defensa no es de calidad.
Aún así, el ‘Cholo’ ha demostrado ser un gran entrenador, y
que si se le mantiene la plantilla puede hacer grandes cosas.
Logró ganar la Europa League, batiendo al Athletic Club, que
había realizado una excelente temporada, y jugando muy bien.
Simeone había dotado
a los jugadores de un carácter necesario, les ha enseñado a meter la pierna
siempre que sea necesario (el equipo que más faltas realiza en Liga y en
Europa), les ha hecho sentir los colores, y ha mostrado un juego con las líneas
muy juntas, donde todos atacan y todos defienden, y en el que el esfuerzo y el
sentimiento de necesitar la victoria es lo más importante.
Ha conseguido ganar un total de 19 partidos, 7 empates y 5
derrotas. Y con 52 goles a favor, y tan sólo 25 en contra. Unos números
espectaculares.
En liga, 10 victorias, 7 empates y 5 derrotas, con 30 goles
a favor y 19 en contra. 37 puntos.
Con los números de
Diego Pablo, el Atleti habría sido 3º en liga, si se hubieran repetido en las
dos vueltas.
Grandes diferencias con Manzano. En especial el sentimiento,
con lo que yo me quedo. Hemos visto sobre el terreno de juego a 11 ‘Cholos’, y
en el futuro seremos 11 colchoneros más.
La conclusión, que no
pueden quedar dudas de que el trabajo del actual entrenador, en un
reducido tiempo, ha sido enorme, y que tiene mucho futuro. Manzano no ha
cuajado en este proyecto, pero sigue siendo buen entrenador, y lo ha demostrado
con otras plantillas. Grande Simeone,
gracias por todo, en especial por la Europa League que nos has regalado.
Quédate por mucho tiempo… Y no dejes que se vaya nadie más que la directiva.
Diles que se vayan.


