domingo, 12 de agosto de 2012

39 jugadores para la Supercopa.


El Atlético de Madrid ha inscrito esta tarde a 39 futbolistas, divididos en dos listas, para la competición que jugarán por haber ganado la Liga Europa. El partido, recuerdo que será el día 31 de agosto, en Mónaco, contra el Chelsea, campeón de la Champions League.
Los rojiblancos han convocado a 22 jugadores del primer equipo, y otros 17 del filial, que se dividen en dos grupos distintos. La lista aún no es definitiva, y podría cambiarse hasta 24 horas antes del partido, pero lo que ya es seguro es que Óliver no estará. La UEFA no permite que el canterano vaya a la cita, ya que no ha tenido el mínimo de antigüedad como profesional (el año pasado estuvo en el Atlético Madrileño), y el reglamento dice que sería necesario que el futbolista hubiera tenido un año contrato profesional, más éste que empieza. Es posible, por tanto, que se pierda también la Europa League el año que viene.
Además, destaca también la ausencia de Manquillo, lateral que ha contado mucho para Simeone, y que realizó, igual que su compañero, la pretemporada con el primer equipo.

Aquí las dos listas:
Primer equipo (22) – Asenjo, Courtois, Joel; Silvio, Miranda, ‘Cata’ Díaz, Godín, Filipe, Juanfran, Pulido; Tiago, Emre, Raúl García, ‘Koke’, Gabi, Mario Suárez, ‘Cebolla’, Arda; Falcao, Borja, Diego Costa, Adrián.

Filial (17) -  David Gil, Cristian, Kader,  Pedro Astray, Iván Calero, Fernando Domenech, Andrés Esteban, Borja Galán, Jesús Martín, Ignacio Monsalve, Álvaro Peral, David Prior, Luis Ruiz, Fallou Wade, Saúl, Ndoye, Pedro

Imitación fallida del ‘Cholo’.


Simeone afrontaba el partido de esta noche como una prueba de Liga, de lo que nos espera en los próximos meses. Y el equipo no rindió como debe.
El partido, comenzó con Courtois en portería, donde no estuvo del todo correcto. En defensa,  Juanfran, Miranda, Godín, y Filipe. Los laterales, bien, como siempre. Los defensas, mal, también como siempre. No entiendo por qué no hablan, tienen fallos de entendimiento incomprensibles, como el del primer gol, además de algunos errores de colocación y que por arriba aciertan pocas. En cambio, los laterales, se lucieron. Si de algo puede presumir el Atlético, es de juego exterior. Los extremos se van un poco hacia dentro, dejando espacio para sus continuas subidas, siempre perfectas, y posteriormente hacen paredes muy buenas. Lo mejor del equipo, sin duda, donde se lució especialmente Cristian Rodríguez con Filipe, en la segunda parte. Los medios, regular. Mario, sólo corta, pero no tiene nada de toque ni verticalidad, y Gabi lleva toda la pretemporada desaparecido totalmente. No toca el balón, y corta poco. Sobra de ahí, totalmente. Por delante, línea de 3, con Adrián, ‘Koke’, y Arda. El media punta, basculaba continuamente bien, pero participaba poco. El canterano debería de jugar donde Gabi, en mi opinión, y dejar entrada a otro, que puede ser Óliver o Raúl García. Adrián y Arda, correctos, pero les ha faltado la chispa de otros días, la que cogerán según avance la competición. Arriba, Falcao, muy desacertado. Lo intentaba, pero le falta ritmo de competición, se le ha notado. Esperemos que mejoren todos un poco. En la segunda parte, además de ‘Cebolla’, entró Tiago, que no hizo nada, y Raúl García, que también aportó bastante poco, aunque sí es verdad que fijó a los defensas, actuando casi de delantero centro.

El partido empezó, como siempre, con mucho tanteo y presión de ambos equipos, pero con peligro de los blanquiazules a balón parado. El Atleti sólo tenía contras, y estaban lentos. Cerca del minuto 10, Riki le ganó la espalda a los dos centrales, tiró a puerta, y tras pararla bien Courtois, nadie despejó y Valerón la mandó al fondo de la red, marcando el primero.
Poco después, tras varios golpes de ambos equipos, una gran jugada por la derecha del Atleti, la centró Adrián, y tras dejarla pasar Falcao, ‘Koke’ la enganchó genial a la cepa del poste. Imparable. Un golazo de toque y florituras.
Los colchoneros tomaron un poco el control del partido, con continuos ataques por ambas bandas, pero los centros no eran rematados por nadie, los deportivistas defendían muy bien, y salían a la contra. Lo único destacable de esos minutos fue un remate de cabeza, pero Aranzubía la sacó con muchos reflejos.
En estos minutos, el Dépor colgó varios balones, y Riki estuvo cerca de marcar, además de un posible penalti por agarrón, cometido por Mario, pero que el colegiado no señaló. A continuación, Adrián tuvo una ocasión clarísima, en la que iban él y Falcao contra el portero, pero el asistente pitó un fuera de juego inexistente. A partir de esa jugada, el colombiano falló un mano a mano, además de pegar un larguerazo. Varias ocasiones, pero por errores de la zaga coruñesa, no por controlar el partido.
Al empezar la segunda parte, Pizzi, que el año pasado estuvo en el Atleti, colgó un balón, y tras una mala salida por arriba de Courtois, Bruno Gama la ajustó a la escuadra fuera, haciendo el 2-1. Simeone veía que el equipo no funcionaba, y metió a Tiago y Cebolla en lugar de Jorge Resurrección y Mario Suárez, buscando coger la pelota, aunque no lo consiguió, ya que el Atleti estuvo 20 minutos sin generar peligro sobre la portería rival, hasta que entró Raúl García, casi en punta, y fijó a los centrales, dejando más espacios. A partir del minuto 70, el Atleti achuchaba, y se sucedían los pases de la muerte que nadie remataba. El mayor peligro fue en los tiros libres. Muchas jugadas ensayadas, que salían bien. Incluso, Adrián tuvo un mano a mano, pero simuló penalti, y el árbitro no se lo concedió.
A 3 minutos del final, en otra de estas jugadas, Falcao cogió un balón en el área pequeña y fusiló, poniendo el 2-2, que llevaría a los penaltis.
Ya en la tanda, fallarían el ‘Guaje’ y Godín, que lo tiró a las nubes, y el equipo local se llevó su copa, el Teresa Herrera.

Así fue el primer partido para Simeone, en el que le salió mal la dupla Mario – Gabi, y triunfó cuando jugó por las bandas, el fuerte del equipo sin duda alguna. Tendrá que aprender de este partido, que para eso lo intentó con sólo 3 cambios. Esperemos que las cosas cambien mucho, porque como todo siga así, mal vamos. ¿Este equipo ha mejorado al del año pasado? Mentira. Diles que se vayan.